Francisco de Luna
Xalapa, Ver.- Este 14 de febrero fue miércoles de ceniza, con el cual se da inicio al tiempo de Cuaresma en el que la iglesia católica llama a la oración por la paz y la conversión de quienes hacen el mal.
Posterior a la misa de bendición e imposición de la ceniza el párroco de Catedral, Roberto Reyes Anaya explicó que «La cuaresma es el tiempo que la Iglesia nos pone para prepararemos y celebrar con dignidad la pascua del señor Jesucristo, su muerte pero ante todo su resurrección que nos salva».
Explicó que llevar ceniza en la cabeza significa reconocer la grandeza de Dios en la pequeñez, «fuimos creados del polvo y hacia el polvo volvemos con la esperanza de la resurrección».
Detalló que en este tiempo se invita a vivir tres actos de piedad: la oración, el ayuno y la limosna para desprenderse un poco de lo que Dios da y favorecer a los que menos tienen.
«Es un llamado a la justicia, a la caridad, en este tiempo difícil que se vive, a la conversión de aquellos que hacen el mal. Es un tiempo propicio para que todos los que creemos en Dios oremos por la paz y por la conversión de quienes constantemente hacen el mal», señaló.
Sostuvo que la abstinencia y el ayuno no es solo no comer carne dado que para el pobre quizá sea el único día que se pueda hacer, sino que se trata de dejar de hablar mal de otros, decir mentiras o pensar mal de los demás.
«Tampoco confundirlo o aprovechar el ayuno para las dietas, porque no se trata de dietas sino de sacrificarnos un poco para experimentar también la carencia que solo es suplida por la providencia de Dios», finalizó.