Francisco De Luna
Xalapa, Ver.-En la calle Insurgentes, cinco negocios han cerrado por la inseguridad. Esta calle se ubica en pleno centro de la ciudad de Xalapa. Los robos en esa zona han sido constantes.
Aquí, sin importar los horarios los ladrones acuden, abren por la fuerza las puertas y ventanas y en el peor de los casos, a punta de pistola asaltan a los dueños de los establecimientos.
Los comerciantes entrevistados, explicaron que en los últimos seis meses, esta céntrica calle se ha convertido en una de las más inseguras.
Ahí una ola de robos a comercios y asaltos a transeúntes tienen asolados a los vecinos, quienes ven cómo los delincuentes cometen sus ilícitos con total impunidad.
Y a pesar de que se encuentran a tres cuadras del Palacio de Gobierno, así como de las oficinas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y del Cuartel de “San José”, los delincuentes no temen cometer los atracos.
En la calle Insurgentes y otras aledañas se han documentado varios delitos cometidos desde octubre de 2018 a inicios de marzo de este año.
El primero de los casos fue difundido a través de un video en redes sociales y ocurrió a inicios de octubre del año pasado.
Las víctimas una mujer y hombre que caminaban por Insurgentes, cuando dos ladrones encapuchados, los atacaron por varios segundos con armas punzocortantes hasta despojarlos de una bolsa de mano y luego huir del lugar.
Desde aquel día siguieron otros hechos delictivos predominando los robos, tales como tiendas de ropa, casas de cambio, ópticas y hasta una cafetería, pero a ello tammbién se han registrado robos de motocicletas y de automóviles.
Un comerciante con un año de haber iniciado su negocio, pidió guardar el anonimato a cambio de relatar la situación que atraviesan los vecinos en medio de los robos y la ola de inseguridad.
Con mucho temor mencionó que se encuentra a la espera de su negocio sea el próximo en ser abierto y saqueado; “ya cuando vengan que se lleven lo que tengo aquí encima porque ya no agarro nada de trabajo”, dijo resignado al mostrar el estante semivacío.
La cafetería había abierto hace unos meses, pero lleva días que ha permanecido cerrado.
Antes del robo ocurrido en febrero en la casa de cambio y que provocó su cierre, dicho comercio había sido saqueado en 2018. Y así se han acumulado los casos de inseguridad en pleno corazón de la capital veracruzana.
