La elección municipal veracruzana, a tribunales / Hora cero

Hora cero

La elección municipal veracruzana, a tribunales

Luis Alberto Romero

Aunque la jornada electoral local para renovar los ayuntamientos en Veracruz se verificó hace dos meses, el proceso aún no ha terminado. Persisten recursos de impugnación interpuestos por distintos partidos, por lo que la última palabra está en manos de los tribunales electorales.

En casi un tercio de los municipios veracruzanos se registraron quejas y denuncias por presuntas irregularidades cometidas durante la contienda. Así, el balón pasó de la cancha del Organismo Público Local Electoral (OPLE) al terreno de la justicia electoral.

La presidenta del OPLE, Marisol Alicia Delgadillo Morales, ha manifestado su confianza en que no será necesario repetir elecciones, como ocurrió en 2022 en Chiconamel, Jesús Carranza, Amatitlán y Tlacotepec, o en 2018, cuando se realizaron comicios extraordinarios en Camarón de Tejeda, Emiliano Zapata y Sayula de Alemán.

Sin embargo, esa posibilidad aún no está descartada. Uno de los casos más sensibles es el del municipio de Chalma, en la región de la Huasteca, donde se registraron hechos violentos durante la jornada electoral. Aunque el conteo de votos favoreció al candidato de Movimiento Ciudadano, Edson Argüelles —quien obtuvo 3,454 sufragios frente a los 3,212 de Hilda Esteban Flores, de la coalición Morena-PVEM—, el eventual llamado a una elección extraordinaria no dependería de la estrecha diferencia entre los candidatos, sino de las condiciones en las que se desarrolló la jornada.

Chalma representa una excepción en un proceso electoral que, en términos generales, se llevó a cabo con tranquilidad. Incluso en municipios tradicionalmente conflictivos, como algunos de la sierra del Totonacapan, no se reportaron incidentes graves ni alteraciones del orden público.

Aun así, las inconformidades sí estuvieron presentes. Un tercio de los municipios veracruzanos enfrenta procesos de impugnación, lo que significa que sus resultados podrían ser modificados en tribunales. Entre los casos más notorios están Papantla y Poza Rica, donde la diferencia entre el primer y segundo lugar fue mínima. En estos municipios, Morena y Movimiento Ciudadano fueron los ganadores preliminares, respectivamente.

Así, el mapa político de Veracruz aún podría sufrir cambios antes de la elección estatal de 2026, dependiendo de las resoluciones que emitan los tribunales electorales en las próximas semanas.

Hasta ahora, de acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), la alianza Morena-PVEM gobernará en 60 municipios. Morena, por sí sola, suma 11 ayuntamientos más. Movimiento Ciudadano, segunda fuerza en el estado, gobernará en 41; el PAN, en 34; el Partido del Trabajo, en 28; el PRI, en 23; y el PVEM, además de su alianza con Morena, lo hará en 13 municipios más.

Ese mapa político, sin embargo, ha comenzado a transformarse incluso antes de que los nuevos alcaldes rindan protesta. Hasta la fecha, siete presidentes municipales electos han cambiado de partido, abandonando al PT, PRI y PAN para sumarse a Morena. Entre ellos, destaca Miguel Ángel Grajales, único candidato independiente que ganó la elección, y que también se incorporó a la llamada Cuarta Transformación.

Esto evidencia que, más allá de los resultados preliminares y de los litigios en curso, el verdadero reacomodo del poder local apenas comienza. La contienda electoral dejó de estar en las urnas para trasladarse a los tribunales… y también a los acuerdos políticos.

En Veracruz, el mapa político está lejos de estar dibujado en piedra: sigue moviéndose, pieza por pieza, voto por voto, y ahora también, por conveniencia.

@luisromero85