Granaderos encapsulan al “cocodrilo” para liberar centro de Xalapa

Juan David Castilla

Decenas de elementos del grupo antimotines de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) arribaron al centro histórico de Xalapa para retirar a Gabriel Romero Reyes, alias “cocodrilo”, y sus acompañantes, quienes protestaban y bloqueaban la calle Juan de la Luz Enríquez.

Los manifestantes habían colocado una carpa sobre la importante arteria vehicular, frente a Palacio de Gobierno, donde permanecieron más de tres horas, provocando un caos vial en la zona y generando pérdidas económicas al comercio establecido.

Desde hace casi un año, el sujeto arribó a Plaza Sebastián Lerdo de Tejada donde montó una carpa y se mantuvo en un plantón permanente.

Sin embargo, este martes 26 de agosto marchó acompañado de un grupo de ciudadanos con el argumento de exigir justicia ante un desalojo de su supuesta propiedad hace 41 años.

La carpa la instaló sobre la calle Enríquez, obstaculizando la circulación vehicular sobre las calles Doctor Rafael Lucio, Leandro Valle y Revolución.

El “cocodrilo” expresó que su caso está en la carpeta de investigación 784/84 y la propiedad se ubica en el barrio de El Dique, en la capital veracruzana.

“Hace 43 años mi madre María Antonia Reyes Cruz, fue despojada de su casa de manera ilícita el cual con artimañas y después de muchas demandas y amparos, la ley le dio la razón”, se lee en una de sus lonas.

Personal de la Dirección de Política Regional y los policías le pidieron que se retirara de manera voluntaria para evitar hacer uso de la fuerza pública y así liberar la vialidad.

Los granaderos encapsularon a los manifestantes mientras el “cocodrilo” gritaba: ¡llévenme detenido, ya me han metido al penal de Pacho Viejo, llévenme otra vez!”.

Gabriel Reyes decidió retirarse por su cuenta. Es considerado un “vividor” por la misma gente, pues es señalado de encabezar manifestaciones para beneficiarse.

Con el personal de Política Regional acordó reunirse el miércoles 27 de agosto a las 17:00 horas en Palacio de Gobierno, en busca de un presunto seguimiento a sus demandas, pero en caso de no lograr acuerdos, amagó con bloquear nuevamente el centro de Xalapa.