Juan David Castilla
El comandante de la Policía Municipal de Tequila, Tito Atlahua Macuixtle, fue identificado como la víctima del cuerpo desmembrado hallado la mañana de este miércoles 8 de octubre dentro de bolsas plásticas negras para basura.
El macabro descubrimiento se realizó a un costado de la carretera federal 123 Orizaba–Zongolica, a la altura de la comunidad de Duraznotla, en la colindancia de los municipios Tequila y Los Reyes, en la región de las Altas Montañas del estado de Veracruz.
El hallazgo, alertado por automovilistas y pobladores cerca del tanque de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), subraya la escalada de violencia que azota a los mandos de seguridad locales en la región centro de Veracruz.
Autoridades estatales y federales reforzaron los operativos de seguridad y la vigilancia en municipios y carreteras de la región, incluyendo tramos como la Orizaba–Zongolica, donde han sido constantes los hechos de violencia durante los últimos meses.
La muerte de Atlahua Macuixtle se suma a una preocupante racha de ataques directos. Según datos de la organización Causa en Común, en lo que va de 2025, al menos 20 policías han sido asesinados en Veracruz, una cifra que coloca al estado entre los primeros lugares a nivel nacional en incidencia de muertes de agentes del orden.
El comandante de la Policía Municipal de Yanga, identificado como José Luis García Domínguez, alias «Matute», fue asesinado a quemarropa la noche del pasado lunes 29 de septiembre dentro de un gimnasio presuntamente de su propiedad.
Mientras que, el pasado 4 de septiembre, el director de Seguridad Pública Municipal de Cosolapa, estado de Oaxaca, Saúl Ríos Reyes, quien vivía en Zongolica, fue acribillado en un restaurante de comida rápida en el municipio de Córdoba.
Mientras la Fiscalía General del Estado (FGE) mantiene abiertas las investigaciones, las autoridades estatales y federales han reforzado la vigilancia en carreteras clave como la Orizaba–Zongolica, aunque los hechos recientes demuestran que la inseguridad continúa siendo un desafío constante y sangriento para el estado de Veracruz.


