Veracruz, foco rojo en robo de motocicletas

Juan David Castilla

El estado de Veracruz enfrenta una creciente problemática de seguridad relacionada con el incremento en el uso y, consecuentemente, el robo de motocicletas.

Si bien el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) reportó en 2024 un total de 4 mil 246 robos de vehículo automotor en la entidad, las estadísticas y la percepción ciudadana apuntan a que las motos se han convertido en un vehículo clave para la comisión de otros delitos.

Aunque no hay cifras desglosadas por el SESNSP que indiquen la cantidad exacta de robos de motocicletas de forma separada de los autos, los datos de organizaciones civiles son alarmantes.

El Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos ha revelado que en el sur de Veracruz, alrededor del 90% de los delitos que se cometen (como asaltos a transeúntes y «cristalazos») se realizan por delincuentes que huyen a bordo de motocicletas.

Este fenómeno se replica en otras zonas urbanas de la entidad, donde estos vehículos permiten una rápida movilidad y escape.

El aumento de robos y el uso criminal de las unidades están ligados a la falta de un control efectivo. El estado de Veracruz cuenta con más de 383 mil motocicletas registradas (INEGI), y su adquisición se ha vuelto cada vez más sencilla.

No obstante, la ausencia de medidas estrictas en la venta y registro facilita el uso en actividades delictivas, especialmente cuando circulan sin placas, con placas alteradas o con conductores sin identificación, un problema que la actual administración estatal ha buscado mitigar con programas de reordenamiento y actualización del padrón.

La tendencia nacional muestra que la mayoría de las unidades hurtadas son desmanteladas y las marcas más buscadas son Italika y Honda.