Redacción
El beneficio del nuevo Contrato Colectivo de Trabajo 2025–2027 alcanza únicamente a los agremiados del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), encabezado por Ricardo Aldana Prieto; en contraste, la mano de obra calificada, el personal profesionista, técnico y administrativo —que mantiene operativa a la empresa— queda fuera del ajuste salarial, lamentó el diputado federal de Acción Nacional, el veracruzano, Julen Rementería del Puerto.
“Tampoco fueron considerados los trabajadores pertenecientes a sindicatos independientes o no afiliados, que representan una parte esencial de la fuerza laboral de Petróleos Mexicanos. Miles de empleados que han dedicado su vida, y mano de obra calificada al servicio de la empresa pública y que hoy son ignorados bajo el argumento de la política de Austeridad Republicana”, reprochó el legislador veracruzano.
Este incremento salarial, valido para los agremiados de la STPRM, pero que excluye a una gran parte de la clase trabajadora. Sólo abre una brecha social importante entre los trabajadores petroleros de la República, primordialmente de Veracruz, Hidalgo, Campeche y Tabasco, por mencionar a algunos.
Hoy, Pemex otorga aumentos a un solo grupo, mientras desprecia al personal que durante décadas defendió la soberanía energética y evitó la privatización de áreas estratégicas como la petroquímica. Fue precisamente el personal de confianza el que, en 2006, respaldó al entonces candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, cuando los líderes sindicales tradicionales respondían a otros intereses. Hoy, esos mismos trabajadores son marginados, dijo el legislador en una rueda de prensa hoy en la Ciudad de México.
A esta exclusión se suma una realidad financiera alarmante. Según su propio reporte al tercer trimestre de 2025, Pemex rompió récord de deuda con proveedores, que ya asciende a 517 mil millones de pesos, más de medio billón.
“Tan solo en los primeros nueve meses del año, la deuda aumentó en 11 mil 109 millones de pesos, mientras el Gobierno Federal presume apoyo financiero con emisiones por 12 mil millones de dólares”, explicó Rementería.
Pemex sigue sin pagar a sus proveedores, sin atender a sus jubilados. En paralelo, el Gobierno Federal destina recursos y petróleo a Cuba, mientras abandona a los trabajadores que sostienen la principal empresa productiva del Estado mexicano.
“La “empresa de todos los mexicanos” hoy aplica justicia laboral selectiva, opera con opacidad financiera y muestra un rostro cada vez más alejado del interés nacional”, concluyó.



