Juan David Castilla
El maltrato y abandono animal persiste como una problemática alarmante en el estado de Veracruz, a pesar de los esfuerzos de autoridades y activistas. Las cifras, aunque fluctuantes, evidencian una realidad de sufrimiento y la necesidad urgente de endurecer las acciones legales y de concientización.
En el municipio de Veracruz, las denuncias por maltrato animal, si bien mostraron una tendencia a la baja en los últimos años según la Dirección de Protección Animal, se mantuvieron en cientos de casos anualmente.
Por ejemplo, se reportaron cerca de 1,000 casos al inicio de una gestión reciente, bajando a 800 en 2023 y a 676 en 2024. A inicios de 2025, los Centros de Salud Animal ya habían atendido 66 denuncias.
Sin embargo, las organizaciones civiles manejan cifras aún más elevadas, lo que sugiere un subregistro oficial. Agrupaciones como Promejora Animal llegan a recibir hasta cinco reportes diarios de animales en extrema vulnerabilidad, mientras que Amo la Vida Grupo Promotora Animal reporta hasta diez auxilios al día en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
Los tipos de maltrato son variados y brutales, incluyendo golpes, abandono, envenenamiento y, en casos extremos, ataques con machetes o zoofilia, según denuncias de activistas.
Abandono y Omisión de Cuidados: es la forma más común, con perros y gatos atados sin sombra ni agua, o dejados a la intemperie en azoteas y terrenos baldíos, como señalan los grupos animalistas. Colonias populares y zonas periféricas son los focos principales.
Crueldad Explícita: recientemente, casos de gran indignación han sido expuestos en redes sociales, como el de un sujeto captado ahorcando a un perrito en Coatzacoalcos, o el rescate de 49 animales maltratados en el albergue «La Roca» en Medellín. También se han documentado incidentes de personas «paseando» a sus mascotas atadas a vehículos en movimiento.
A pesar de que el Código Penal de Veracruz castiga el maltrato animal con penas de 6 meses hasta 4 años y 6 meses de prisión y multas considerables, las sentencias efectivas son mínimas. Un reporte del Poder Judicial de Veracruz (PJEV) en 2023 indicó que solo se registraban cuatro resoluciones por delitos de crueldad, sin castigos graves.
Organizaciones animalistas claman por una actuación más contundente de la Fiscalía Especializada en Delitos contra el Medio Ambiente y los Animales (FEDAYCA), exigiendo que las denuncias se traduzcan en multas y cárcel. La falta de castigo perpetúa el ciclo de violencia contra los seres vivos que no tienen voz.
 
            