Pobres de ellos, qué fregados están / Bernardo Gutiérrez Parra

Desde el Café

Pobres de ellos, qué fregados están

Bernardo Gutiérrez Parra

Sin que viniera al caso, porque no venía al caso, la presidenta Claudia Sheinbaum dio a entender en Querétaro que México es más fregón que Estados Unidos porque “allá tienen muchos problemas de valores; hay mucha drogadicción y muchos otros temas que nosotros no tenemos; (Estados Unidos) no es un país modelo”.

Futa…

De que allá hay mucha drogadicción, hasta por sabido se calla. Pero acá qué; ¿acaso somos un ejemplo para el mundo en disminución de consumo de estupefacientes? ¿Tenemos autoridad moral como para aventarles la pedrada?

Tan alto es el consumo aquí que el gobierno de la 4T se ha hecho guaje con la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (o Encuesta Nacional de Adicciones), cuyos resultados debieron darse a conocer desde el 2023, pero están guardados casi en la clandestinidad.

En su mañanera del 30 de julio del 2024, el falaz de Andrés Manuel se hizo acompañar por el secretario de Salud, Jorge Alcocer y dijo textual: “Se mandó a hacer una encuesta porque necesitamos saber cómo vamos, pero sobre todo, si ha habido incremento y en qué proporción, en el consumo de drogas, porque eso lo tenemos que cuidar mucho. Entonces ya nos van a entregar…” y se volteó hacia Alcocer que le dijo: “La encuesta la tiene ya Jesús (Ramírez Cuellar) para su análisis”.

“¿Ya la tenemos? -preguntó el presidente-. La vamos a ver para saber cómo estamos. Pero fundamentalmente por el consumo de drogas y de los químicos. Vamos a revisarla y cuando se pueda Jesús, la presentamos”. A lo que Jesús Ramírez contestó: “Hay que revisarla porque son muchas páginas”. “Si, la revisamos” finalizó el presidente.

Y la revisada ya lleva un año y cinco meses.

¿Qué tiene la encuesta que mandó hacer el señor Alcocer?

Tiene lumbre informativa lector. Dice que el consumo de drogas en este país, principalmente de fentanilo, se ha disparado una barbaridad. Por su parte, el informe de World Drug Report 2025, dice que el consumo de enervantes ha subido exponencialmente del 2018 para acá.

¿Por qué no la da a conocer Claudia Sheinbaum? Ah, porque “tiene errores metodológicos y fallas en el levantamiento de datos”, por lo que hay que hacer otra que se dará a conocer en breve, ya prontito, ay cuando se pueda… si Dios quiere.

Si en Estados Unidos tienen problemas de valores, en este México nuestro estamos entrampados con la honestidad, un valor del que carecen tanto la 4T como los gobiernos emanados de Morena.

La mentira, la falta de transparencia, la corrupción y la desvergüenza, son más comunes aquí que allá.

En verdad te digo lector, Claudia no tenía por qué compararnos con Estados Unidos porque estamos infinitamente más fregados. Y van dos ejemplos cotidianos: los cientos de desplazados por la violencia que quieren irse a vivir allá. Y los miles de campesinos que prefieren caminar la legua, cruzar el río Bravo y enfrentarse a la policía de Trump, antes que esperar inútilmente los insumos para labrar la tierra.

¿Sabrá Claudia que su gobierno y el de su antecesor han sido los que menos apoyos han brindado al campo desde el término de la Revolución?

Pero había que decirle algo pegador a los estudiantes de Querétaro que recibieron sus becas Benito Juárez, además de instarlos a echarle ganas y comprometerse “con el estudio, con la familia, con el prójimo, con la naturaleza y con la patria”.

La presidenta agregó que la construcción de escuelas y la entrega de becas ha hecho posible que menos adolescentes dejen sus estudios. Y en el tema de la construcción de escuelas me quiero detener.

Apenas se terció la banda presidencial, López Obrador prometió que en 2019 se construirían 100 universidades Benito Juárez en todo el país y albergarían a 64 mil alumnos. Es decir, 640 alumnos por universidad en promedio; una matrícula apenas regular. Pero un año después la propia presidencia reconoció que no se había construido ninguna universidad, sino que todas estaban en sedes provisionales “donde se imparten 36 carreras profesionales con una matrícula de 15 mil 105 estudiantes” o 151 alumnos por universidad. Una matrícula paupérrima.

Al término de su mandato corrió la versión no desmentida por nadie, que fueron en total 203 las universidades Benito Juárez que “entregó” el señor presidente. ¿Cuánta matrícula tienen? ¿Cuántas generaciones de alumnos han salido de ellas? ¿Dónde están situadas?, son secretos de Estado.

Pero independientemente de lo anterior, la presidenta tiene razón. Aparte de que carecen de valores, los gringos no tienen como nosotros, el primer lugar como el país sin guerra más peligroso y violento del mundo según la Iniciativa Global de Datos y Ubicación de Conflictos Armados. Allá no hay desmembrados, ni legiones de mujeres buscando a sus hijos desaparecidos, ni 70 asesinatos con violencia cada 24 horas en promedio.

Allá no existen carreteras arruinadas, ni hospitales descarapelados, ni personal médico sin insumos, ni desabasto de medicamentos desde hace seis años. Tampoco tienen a 62 millones 600 mil sujetos y sujetas sin seguridad social.

Pobres gringos, qué pena dan. Quizá por eso se cuentan por miles o cientos de miles los que quieren brincar el río Bravo de allá para acá.

bernagup28@gmail.com