Carpe Diem
Manolo Victorio
El desorden que dejas
Termina la semana 52 del 2025 y entramos en la recta final del año, que será también, la primera semana del 2026 cuando al menos 211 alcaldes y alcaldesas electas levantan el brazo derecho en la rendición de protesta que encierra como simbolismo ético-filosófico «no fallarle al pueblo» que depositó su confianza cuatrienal en las urnas.
El miércoles 31 de diciembre es la fecha fatal que trae con las ascuas en la hornilla a los electos y en el otro lado de la moneda, nerviosos, inquietos a quienes se van de la silla municipal, en la mayoría de los casos, con el repudio de los electores que confiaron en ellos y que ahora los desprecian porque el único cambio que generaron fue el aspiracional, traducido en una inmejorable condición patrimonial.
Llegaron con una mano atrás y el 31 de diciembre se marcharán con una bolsa acumulada de mil 537 millones 550 mil 416 pesos con 82 centavos, cifra exacta detectada por el Órgano de Fiscalización Superior en por lo menos 174 ayuntamientos que presentaron quebranto patrimonial, eufemismo conceptual que esconde el verdadero motivo: se robaron el dinero del pueblo.
Los 174 nuevos ricos, presidentes municipales salientes que se compraron ranchos ganaderos, caballos cuarto de milla, Cheyennes apá y alcaldesas salientes que se cambiaron hasta la dentadura y se metieron cuchillo a diestra y siniestra con el dinero del pueblo, se irán en unas horas al basurero de la historia en medio del denuesto público.
Nada pasará con las amenazas del ORFIS plasmadas en las fojas de las carpetas de investigación presentadas en la barandilla de la Fiscalía General del Estado. Casi nadie pisará la cárcel.
A nadie espantaron las denuncias levantadas por la Maestra Delia González Cobos, titular del ORFIS, ni hubo alcaldesas y alcaldes conversos ante los llamados del profesor Esteban Bautista Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política de la sexagésima séptima legislatura, quien recorrió las cinco regiones del estado con la conseja jesuita que meterle la mano al cajón es pecado inconmutable.
Al votante no le extraña este circo que representa el ejercicio del poder municipal. Ya no vota por el personaje más honesto sino por el menos peor.
Es lo que hay, suele resignarse cada cuatro años.
En el Puerto de Veracruz, el municipio más importante de los 211 que se renovarán, toda vez que en Jáltipan la elección municipal fue anulada por mayoría de votos de los magistrados de la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), quienes confirmaron la decisión del Tribunal Electoral de Veracruz (TEV) que anuló los resultados de la elección municipal en ese municipio sureño, no hubo transición ordenada.
Patricia Lobeira Rodríguez dejó escapar una oportunidad única de diplomacia política y de dejó contaminar por odios y pasiones que le son ya ajenos, y se metió en el callejón de la intolerancia.
Craso error, dirían los puristas de la ciencia política.
En el berrinche del fin de su cuatrienio, la alcaldesa armó un burdo tinglado con el dirigente del sindicato de la limpia publica, Antonino Baxzi Mata que tiene a la ciudad inundada con montañas de basura.
Que tristeza para el porteño que ama a su ciudad ver como en los cruceros, esquinas y en cualquier espacio público, las bolsas de desechos solidos siguen a la intemperie, generando un caldo de cultivo de enfermedades y también una crisis política donde el pagano es el ciudadano de a pie.
Los esfuerzos de la gobernadora Nahle, quien ha montado una campaña de promoción para despedir el año viejo y recibir el año nuevo en el Puerto jarocho, se estrellan contra la indolencia de una alcaldesa que lo único que desea es complicar la llegada de Rosa María Hernández Espejo al palacio municipal.
Una rabieta que perjudica la imagen del Puerto de Veracruz como un destino turístico idóneo para pasar las fiestas de fin de año.
El desorden que deja la señora Lobeira Rodríguez es ofensa para los ciudadanos quienes ya están hartos de un clan político que arrastra una muy mala imagen pública.
El «dejar hacer, dejar pasar» (del francés Laissez faire, laissez passer) es una pésima táctica política en las últimas horas de retención del poder.
La ley tiene dientes, como sostiene la gobernadora Nahle, la ley es dura, pero es la ley. Una vez que el poder se esfuma, la persona queda sujeta al imperio de la ley proyectada cuatro años atrás.
Los porteños tienen la esperanza que el problema de la recolección de basura se solucione antes de la transición que atestiguará la gobernadora Nahle en la Plaza del Heroísmo Veracruzano, donde Rosa María Hernández Espejo rendirá protesta como la primera alcaldesa de Morena en la historia de la tetra heroica ciudad de Veracruz.
La periodista Hernández Espejo se mostró expectante ante la inminente toma de protesta. En una cena navideña con comunicadores de la Asociación de Periodistas de Veracruz que preside Rodolfo Herrera Sánchez, dijo en un discurso cálido, a sus pares:
«No les voy a fallar», dijo Rosa María ante gremio periodístico, primer filtro de la ciudanía que espera resultados ante el abandono y saqueo de la ciudad.
En ese sentido, la alcaldesa electa de Veracruz, Rosa María Hernández Espejo, destacó la cercanía y el valor del gremio periodístico, reconociendo en quienes lo integran una voz fundamental para la ciudad de Veracruz y para quienes todos los días buscan ser escuchados.
Fue una rendición de protesta simbólica, donde el gremio periodístico se erigió en juzgado moral al esgrimir la premisa de no fallarle al pueblo elector.
… de otro costal.
En Xalapa recién concluyó el proceso de entrega ̶ recepción, dónde ambas partes, la saliente, representada por personeros de Alberto Islas Reyes y la entrante, que encabezará en unas horas Daniela Griego Ceballos, decidieron que lo mejor es la continuidad del proyecto cuatroteísta.
En las reuniones exhibieron disposición de hacer un buen trabajo, es más, de mejorar lo ya construido.
En esta larga elipsis de espera, la alcaldesa electa, Daniela Griego eligió a gente de toda su confianza, a auténticos colaboradores los cuales sacaran el trabajo en tiempo y forma con dos premisas básicas: lealtad y eficiencia.
Los xalapeños esperan que todos, todas y todes los que llegan con ella sean así, que tenga sentido de responsabilidad y sepan entender eso de la confianza depositada en ellos.
Y lo anterior viene a colación por el actuar de un elemento de la Policía Municipal que ya anda presumiendo a priori tener en la bolsa una subdirección operativa en dicho cuerpo de seguridad municipal.
Dicen en el equipo de transición que el individuo alardea de tener una fuerte influencia sobre la alcaldesa, Griego Ceballos, gracias al noviazgo que lleva con una regidora electa.
Estas pretensiones se quedarán seguramente en la esfera del radio pasillo, porque si algo ha demostrado la próxima alcaldesa es carácter traducido en decisiones firmes.
No escuchará cantos de sirenas a la hora de palomear puestos estratégicos y sumamente delicados, sobre todo, en un renglón tan sensible como es la seguridad personal y patrimonial de los xalapeños.
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