Juan David Castilla
Docentes de Telebachillerato que laboran en el municipio de Ilamatlán, al norte de la entidad, han solicitado formalmente su cambio de adscripción, motivados por el peligro constante que representan los deslaves de cerros en las rutas y comunidades de la región serrana.
José Reveriano Marín Hernández, secretario general de la Sección 56 del SNTE, confirmó que el sindicato ha recibido al menos diez solicitudes de maestros que buscan ser trasladados a zonas con menores condiciones de riesgo.
El dirigente explicó que el temor del personal se intensificó tras el pasado 10 de octubre, cuando lluvias torrenciales provocaron inundaciones y movimientos de tierra que dejaron incomunicadas a diversas localidades.
Aunque el magisterio reconoce el compromiso de llevar educación a las zonas más apartadas, Marín Hernández señaló que es necesario atender las peticiones de quienes laboran en áreas críticas de la Huasteca y la sierra de Zongolica, donde la estabilidad de los caminos es precaria.
Las gestiones para estos movimientos ya se realizan en conjunto con la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) para garantizar que los docentes desempeñen sus funciones en entornos seguros.
Pese a los daños estructurales reportados en algunos planteles tras las contingencias climáticas, el también diputado local descartó que exista el riesgo de perder el año lectivo.
Subrayó que, ante la imposibilidad de utilizar ciertos inmuebles, los maestros han implementado estrategias de enseñanza a distancia y asesorías en espacios alternos seguros, manteniendo así la continuidad pedagógica.
El dirigente sindical reiteró que el calendario escolar está garantizado en los municipios impactado a por las inundaciones. Aseguró que las medidas preventivas y la flexibilidad del personal educativo han sido clave para que el alumnado no vea interrumpido su proceso de aprendizaje, mientras se resuelven las necesidades de infraestructura y las solicitudes de seguridad laboral del personal.



