Juan David Castilla
Cansados de diez años de abandono y de poner en riesgo sus vidas, habitantes de comunidades entre Altotonga, Veracruz, y Teziutlán, Puebla, bloquearon la carretera federal este lunes 6 de octubre.
La manifestación se llevó a cabo en Santa Cruz, municipio de Atzalan, como medida extrema ante la nula respuesta a sus peticiones de rehabilitar una vía de comunicación devastada por baches, deslaves y grietas.
La protesta, que generó largas filas de vehículos, busca visibilizar una emergencia: las malas condiciones del camino han provocado múltiples accidentes y paralizado la vida de cientos de familias, estudiantes y productores agrícolas.
Estos últimos denuncian que la vía es clave para la economía local, el traslado de cosechas y el acceso a servicios básicos.
Con pancartas en mano, los inconformes enviaron mensajes contundentes a las autoridades estatales y federales: “Queremos un camino digno y seguro” y “Pedimos respuesta de la gobernadora Rocío Nahle”.
Los pobladores insisten en que han agotado las vías formales y ahora exigen la intervención directa de la gobernadora Rocío Nahle García y la presidenta Claudia Sheinbaum para asignar los recursos necesarios.
Ante el riesgo constante de accidentes, el daño vehicular y el impacto en el acceso a servicios de salud y educación, los habitantes demandan una respuesta inmediata. Mientras no haya un compromiso concreto, advierten, la protesta pacífica continuará.


