Investigación de egresada UV busca reducir contaminación por plásticos

  • Malinalli Ramírez Martínez cursó la Licenciatura en Ingeniería Química, en la región Veracruz 
  • La joven se doctoró en Ciencia e Ingeniería Ambiental en la Universidad “Rey Abdullah”, de Arabia Saudita 
  • Reconoce a la Universidad Veracruzana como la base de su trayectoria científica 

Redacción Hora Cero

Malinalli Ramírez Martínez, egresada de la Licenciatura en Ingeniería Química de la Universidad Veracruzana (UV), región Veracruz, desarrolló un estudio que permite disminuir la contaminación por plásticos y reducir la dependencia de materiales derivados del petróleo. 

Su investigación la realizó como parte del Doctorado en Ciencia e Ingeniería Ambiental, posgrado que cursó en la Universidad de Ciencia y Tecnología “Rey Abdullah” (KAUST, por sus siglas en inglés), ubicada en Thuwal, Arabia Saudita, una de las instituciones líderes en investigación avanzada a nivel mundial. 

El trabajo doctoral se centra en el desarrollo de membranas poliméricas sostenibles, materiales capaces de actuar como filtros a nivel molecular para purificar agua, separar compuestos industriales y mejorar procesos ambientales.

La originalidad de su proyecto radica en el uso de solventes verdes y materiales reciclables derivados de desechos plásticos, una línea de investigación que ha llamado la atención de la comunidad científica internacional. 

Actualmente es parte de la Plataforma Avanzada de Membranas y Materiales Porosos, centro científico colaborativo que desarrolla proyectos para transformar residuos plásticos en membranas reciclables de alto rendimiento; así como del Grupo de Investigación de Membranas Poliméricas Nanoestructuradas, ambos de la KAUST. 

Entrevistada por Universo, Ramírez Martínez destacó que su tesis se enfocó en reducir la toxicidad de los procesos de fabricación de membranas usando solventes verdes y materiales eco-amigables: “La idea es convertir un problema como los desechos plásticos en una solución útil y circular”, detalló. 

 

La joven veracruzana con sus compañeros del Grupo de Investigación de Membranas Poliméricas Nanoestructuradas de la KAUST

 

La relevancia de este trabajo es profunda: permite disminuir la contaminación por plásticos y reducir la dependencia de materiales derivados del petróleo, explicó. 

“Usar materiales reciclados y solventes verdes es esencial para proteger la salud humana y el ambiente. Debemos mantener los materiales en circulación tanto tiempo como sea posible para respetar los límites de recursos del planeta”, enfatizó. 

Sobre las posibles aplicaciones de su propuesta para México y Veracruz, la joven considera que su trabajo tiene un enorme potencial: “Las membranas que desarrollé podrían utilizarse para producir agua potable y tratar aguas residuales.  

En Veracruz, donde abundan los residuos plásticos y existe un reto en cuanto al tratamiento de agua, estas tecnologías serían muy útiles. También sería interesante impulsar a empresas mexicanas que fabriquen membranas con biopolímeros y materiales reciclados”, propone. 

En cuanto a su trayectoria científica y académica, dijo que la máxima casa de estudios de Veracruz fue la plataforma que la impulsó hacia la ciencia internacional de alto nivel: “La UV me enseñó a confiar en mis capacidades y a entender el impacto social de la ciencia”, afirmó.  

Su formación en la Facultad de Ciencias Químicas de la región Veracruz fue integral y competitiva, resaltó: “Tuve excelentes profesores que me brindaron una enseñanza de calidad. Muchos de ellos estudiaron en el extranjero y tenerlos como ejemplo me motivó a seguir sus pasos”. 

Uno de los momentos clave en su formación ocurrió en segundo año, cuando conoció a la investigadora Andrea Martínez, entonces directora del Centro de Investigación en Micro y Nanotecnología (Microna). 

 

Aspecto de la ceremonia de graduación del Doctorado en Ciencia e Ingeniería Ambiental de la Universidad “Rey Abdullah”

 

 

“Me invitó a su laboratorio y ése fue mi primer acercamiento real a la investigación científica. Realicé estancias en Microna y en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) en Mérida, Yucatán, y desarrollé mi tesis sobre la degradación de colorantes en agua usando nanoestructuras de dióxido de titanio. Esa base me abrió las puertas al posgrado internacional”. 

Malinalli Ramírez presentaría dicho trabajo en un congreso internacional, experiencia que consolidó su interés por la investigación ambiental. 

Con respecto su estancia en otro país, narró que vivir en Arabia Saudita “ha sido una experiencia multicultural, enriquecedora y aleccionadora que transforma. Me he sentido bienvenida y segura, pues los mexicanos somos muy apreciados aquí y he podido desmentir muchos prejuicios sobre el mundo árabe. Trabajar en un laboratorio multicultural me ha enseñado a tener una mente abierta y a valorar la diversidad como motor de buenas ideas”. 

La vida en la KAUST también le ha permitido comprender las diferencias estructurales entre instituciones científicas: “Aquí el financiamiento no es una limitante. El acceso a equipo y recursos es impresionante. Aunque México tiene grandes talentos, necesitamos más apoyo para la investigación”, comentó. 

Malinalli Ramírez ha publicado los resultados de su investigación en revistas de alto impacto como Green Chemistry, de The Royal Society of Chemistry (RSC), Reino Unido, y Applied Polymer Materials Journal, de The American Chemical Society (ACS), Estados Unidos; además de presentar su trabajo en congresos internacionales, como el organizado por The North American Membrane Society (NAMS) y EuroMembrane, de The European Membrane Society (EMS). 

 

Desafíos personales y motivación ambiental 

La joven veracruzana compartió que su mayor reto no fue científico, sino emocional: “Viajar de México a Arabia Saudita toma más de 24 horas. Extrañar a mi familia fue lo más difícil, pero valió completamente la pena por todo lo que aprendí”. 

Su motor principal es claro: “Quiero contribuir a resolver las problemáticas ambientales que hemos provocado. Trabajar en tecnologías sostenibles es mi manera de aportar a un mundo mejor”, aseguró. 

Después del doctorado, Malinalli busca continuar su desarrollo en instituciones internacionales y aplicar la tecnología de membranas en diversas industrias: “A corto plazo quiero seguir aprendiendo en el extranjero, pero a largo plazo deseo regresar a México y colaborar con instituciones como la UV para impulsar la ciencia y la tecnología en nuestro país”. 

A las y los jóvenes interesados en la ciencia, les deja un mensaje directo: “La ciencia es para todos. Prepárense desde temprano, aprendan inglés y no se limiten a los destinos tradicionales. Hay universidades en Medio Oriente y Asia con oportunidades extraordinarias. Si trabajamos duro, podemos llegar tan lejos como queramos”. 

Para concluir, señaló: “Me siento muy orgullosa de poner en alto el nombre de la Universidad Veracruzana, que me dio la base que necesitaba para llegar hasta aquí”. 

Malinalli Ramírez Martínez es un ejemplo del impacto global que puede tener la formación científica de calidad que se imparte en la UV, y una inspiración para las nuevas generaciones que buscan transformar al mundo con conocimiento, innovación y compromiso ambiental.